La Historia Detrás de la Canción: “Mediterráneo” de Joan Manuel Serrat





Se trata del referente de la canción moderna en lengua castellana y catalana, oriundo de Barcelona y con una historia personal tan vasta y rica como sus propias canciones, Joan Manuel Serrat recibió el miércoles pasado el reconocimiento a la Persona del Año de la Academia Latina de la Grabación, una de las distinciones más importantes para los artistas de habla hispana. Fue una noche de recuerdos y revelaciones, en el que grandes artistas como Joaquín Sabina, Jorge Drexler o Andrés Calamaro, homenajearon al cantautor de 70 años.

Con buen humor, el artista agradeció a las estrellas y al público asistente: “Me siento muy feliz, muy honrado esta noche. Es muy emocionante para mí. Por primera vez asisto a un concierto mío en el que no canto”. El trofeo que recibió, le fue entregado por Laura Tesoriero y Neil Portnow, presidente de la Academia Nacional de las Artes y Ciencias de la Grabación. El público le pidió a Serrat la interpretación de Mediterráneo, una de las canciones mas emblemáticas del catalán.

Algunas leyendas urbanas afirman que Serrat compuso «Mediterráneo» a finales de 1970, en el encierro que protagonizó en el Monasterio de Montserrat junto a un grupo de intelectuales y artistas, en señal de protesta por el proceso de Burgos y en contra de la pena de muerte. El Proceso de Burgos, fue un juicio iniciado el 3 de diciembre de 1970 en la ciudad española de Burgos contra dieciséis miembros de la organización armada nacionalista vasca Euskadi Ta Askatasuna (ETA) acusados de los asesinatos de tres personas durante la dictadura del general Franco. Las movilizaciones populares y la presión internacional lograron que las condenas a muerte impuestas a seis de los encausados no llegaran a ser ejecutadas, siendo conmutadas por penas de reclusión.

Se dice también que en sus primeros borradores la llamó «Amo el mar» e «Hijo del Mediterráneo». Otra versión señala que la canción fue compuesta, al igual que el resto del disco, entre agosto y noviembre de 1970 a caballo entre Calella de Palafrugell (Costa Brava), Fuenterrabía (País Vasco) y Cala d’Or en Mallorca. Un tema de la magnitud de Mediterráneo da para alimentar las más variadas teorías.

La verdadera historia se conoció de la voz del propio Serrat en una entrevista hecha por El País con motivo de sus 50 años de carrera en 2014, durante su estancia en el interior de México, alejado del mar: “Estaba en México, llevaba semanas en el interior. Soñaba, literalmente con él. Agarré el coche y me fui a un lago, aunque sólo fuera por hacerme a la idea del mar que yo añoraba. Es en esos casos cuando me doy cuenta de que para mí, el mar, y concretamente el Mediterráneo es una identidad: una identidad feliz”, asegura.

En 2004, Mediterráneo, fue elegida por votación popular como la mejor canción de la historia de la música popular en España, en un programa de Televisión Española, de título Nuestra mejor canción.

Fue también elegida la mejor canción del pop español por la revista Rolling Stone en 2010, entre otras muchas listas de música popular, la catalogan como la mejor canción escrita en español.

Letra:

Quizás porque mi niñez
sigue jugando en tu playa
y escondido tras las cañas
duerme mi primer amor,
llevo tu luz y tu olor
por dondequiera que vaya,
y amontonado en tu arena
guardo amor, juegos y penas.
Yo, que en la piel tengo el sabor
amargo del llanto eterno
que han vertido en ti cien pueblos
de algeciras a estambul
para que pintes de azul
sus largas noches de invierno.
a fuerza de desventuras,
tu alma es profunda y oscura.
A tus atardeceres rojos
se acostumbraron mis ojos
como el recodo al camino.
soy cantor, soy embustero,
me gusta el juego y el vino,
tengo alma de marinero.
qué le voy a hacer, si yo
nací en el mediterráneo.
Y te acercas, y te vas
después de besar mi aldea.
jugando con la marea
te vas, pensando en volver.
eres como una mujer
perfumadita de brea
que se añora y que se quiere
que se conoce y se teme.
Ay, si un día para mi mal
viene a buscarme la parca.
empujad al mar mi barca
con un levante otoñal
y dejad que el temporal
desguace sus alas blancas.
Y a mí enterradme sin duelo
entre la playa y el cielo…
En la ladera de un monte,
más alto que el horizonte.
quiero tener buena vista.
mi cuerpo será camino,
le daré verde a los pinos
y amarillo a la genista.
Cerca del mar. porque yo
nací en el mediterráneo.