Serrat y Forges: La realidad está en la calle, hay que escucharla



El cantoautor catalán Joan Manuel Serrat (i) dialoga con el viñetista Antonio Fraguas “Forges”(d), uno de los grandes humoristas gráficos españoles, dentro del festival internacional de humor La Risa de Bilbao. EFE


Bilbao, 9 oct (EFE).- El cantautor Joan Manuel Serrat y el humorista Antonio Fraguas “Forges” han coincidido hoy en que lo que importa para inspirarse es “enterarte de lo que pasa en la calle, hay que escucharla”, y trabajar sobre ello.

Los dos han estado en el festival de humor La Risa de Bilbao. Serrat tenía que hacerle una entrevista a Forges, pero no estaba muy dispuesto, así que han iniciado una conversación, a los sones de “Para la libertad”.

Primero Forges le ha preguntado a Serrat: “¿Cualquier tiempo pasado fue mejor?

Serrat: No, qué va. Hoy es el día mejor de mi vida.

F: Lo has cantado. Es importante que las vidas sean anchas. No es mío, me parece que era de Miguel Hernández.
S: Una pregunta que no te habrán hecho nunca: ¿es complicado tener que hacer un dibujo diario?

F: No es nada difícil. Poneos delante de una mesa una hora al día, a la semana ya has hecho un chiste, pero como no os ponéis… Es un “trantrán”. Tú has hecho cosas más trascendentales. Has cantado a todos los pueblos la misma canción, y eso es complicado, lo del dibujo es sencillo.
Tienes que enterarte de lo que pasa en la calle, no vayas nunca a una redacción. Puede que al redactor jefe se le haya llevado el coche la grúa y decide que ese día hay que ir por el ayuntamiento.
S: Lo tuyo también es importante. ¡Cuánto habrán hecho tus bocadillos con eso de “y no te olvides de Haití”. Estoy de acuerdo, escuchar a la calle, lo que la gente dice y trabajar sobre ello, no esperar que venga un rayo divino que te ilumine.

F: Cuando dibujo, silbo y tarareo tus canciones.
S: Sentí que mis canciones trascendían el día que escuché una en Girona, “Paraguas de amor”, en un “toldao”. Eso es el éxito.

F: Ahora te pregunto yo otra (pregunta) que no te han hecho nunca. ¿Tú, qué haces primero, la música o la letra?
S: Busco encontrar un gancho, sea una frase literaria o musical y tiro del hilo. 
Voy cortando y pegando. El corta y pega lo inventé mucho antes que Apple.

F: ¿Te cuento lo de Franco? Yo era “oyesveses” -de oye y ve- en Televisión Española. Cuando se estropeaba el televisor de Franco, llamaban. Llamaron, era verano, yo con sandalias y el pelo al cero. Llegamos, no había ningún libro, encima del televisor había folletos del plan del Segura, y aparece Franco, era un señor bajito…
S: Sí, lo recuerdo.

F: Dice, “Buenas tardes”, se pone pegado a la pared y se queda allí. Tenía la frialdad de un besugo. No se metió en nada, también es cierto. Total, que los que estaban se iban pasando las carpetas del Segura, y yo era el último, pero me tiré a por un florero que se caía, y se las dieron (las carpetas) a Franco.
Yo salí detrás de él, corriendo: “¡Excelencia, déme los papeles!”. “No importa”, me dijo. La broma que tuve a partir de entonces era que yo había hecho trabajar a Franco.
S: Cuenta la realidad.
Yo fui un niño pobre.

F: Yo era más pobre que tú: tenía calzoncillos de una sola pernera.
S: Eso es ser pobre. ¿Cuántos hermanos erais?

F: Nueve.
S: ¿Y os repartías cuatro perneras y media cada uno?

F: ¿Tú cantas a una persona en los conciertos?, ¿usas ese truco?
S: No. A veces lo he hecho y me ha pasado que se han dormido… Bueno, al menos no roncan. Sí veo que la gente se saca unas tabletas enormes y, desde que sales, lo graba todo. Intento decirles que hay una realidad, un mundo más allá del Windows.

F: Tenemos una gran suerte. Eso de que te miren con reconocimiento es muy importante. A mí me paran por la calle y me dicen: “¿Cómo supo el jueves lo que mi cuñado Paco había dicho el miércoles?”. Es la calle.
S: A mí ya no me atosigan en la calle: los que están en edad de atosigar ya no atosigan, y los otros, tampoco. Me siento muy bien tratado y lo reconozco en las caras que veo.

F: Lo último que digo. Nos ponen una botella de agua (la vierte en un vaso) e incita al pis.
S: Lluvia dorada se llama.