JOSÉ MARÍA LASSO DE LA VEGA


Lasso de la Vega (izquierda) y su representado, Joan Manuel Serrat, recibiendo un disco de oro en México en 1969.



Fue el primer mánager de Serrat y una figura clave en su rápido ascenso hacia el estrellato. La profesionalidad de Lasso unida al talento de su artista y a la tremenda capacidad de trabajo de los dos, logró que cada paso de Joan Manuel fuera un avance seguro en el camino del éxito. El tándem funcionó hasta 1975 en que diferencias personales disolvieron lo que parecía una sociedad perfecta y rentable. 

Lasso que, para entonces, ya tenía consolidado su prestigio como mánager de artistas, nos cuenta a modo de anécdota que «yo no quería hacerme cargo de los asuntos de Joan Manuel, pero terminé accediendo a instancias de Ramón Arcusa. El Dúo Dinámico son como hijos para mí y siempre me ha costado mucho negarles cualquier cosa, de manera que acepté para complacer a Ramón y la verdad es que nos fue bien a los dos». 

El ex representante de Serrat no entra en las causas por las que se produjo la ruptura aunque no duda en admitir que tuvo como consecuencia un distanciamiento que todavía dura. «Pero todo ello -advierte- no implica que dejara de creer en Joan Manuel como artista. Creía entonces y sigo creyendo ahora en él como autor, como músico y como intérprete. En cuanto a su forma de ser lo único que puedo decir es que es un hombre con tan buena estrella que todos los reveses se le convierten en corona de laureles.

Joan Baeza