El policía franquista que espiaba a Serrat


En Jefatura, me habían encargado que lo vigilara. Me llamo Ramón. A secas y sin apellido, porque soy un policía que lleva una pistola “Astra”. Desempeño mis funciones en la Comisaría donde se encuentra la Brigada Político Social. Es decir Ramón, sin más. En mi despacho tengo un retrato del Generalísimo Francisco Franco, y otro con el Yugo y la Flechas de la Falange.

Trabajo junto con otros compañeros agentes de uniforme, gorro, grilletes de acero, y pistolas “Llama” y “Star 9”, que son de la Policía Armada, y que los “rojos” llaman “grises” por el color de su uniforme, y porque sacan la porra y pegan duro en las manifestaciones estudiantiles. Hay que recordar a quien me pueda leer, que hablo de Barcelona en 1965, un año después de los 25 años de la Paz concedida por el Generalísimo Franco a todos los españoles, aunque siempre de guardia, y atentos a cualquier acto de desorden, por ejemplo, una reunión de más de tres personas, o una manifestación de ciudadanos, que, aunque parezcan trabajadores, son todos comunistas y peligrosos, sobre todo si llevan barba o bufanda.
Tengo el expediente en mi mesa para estudiarlo.

Se llama Juan Manuel Serrat, y pertenece a una familia obrera con un padre que fue un anarquista exiliado, y que militó en la CNT. Ahora el chico lleva melena, toca la guitarra y canta poesía inspirada en Neruda y otros. Aquí lo llaman “Nova Cançó”, y es una música basada en la “Nouvelle Chanson Francesa”, cuyos exponentes son esos melenudos como Georges Brassen o Leo Ferré, pero que en definitiva, comienza a ser alguien con un nombre que suena fuerte aquí en Comisaría, porque además, defiende el derecho de la lengua catalana, es decir, se trata de un “rojo” triplemente peligroso, por antisocial, por comunista y por separatista.

Le estoy investigando a fondo, y según esta Carta Astral que tengo delante, y que me pasan del Departamento Arcano que rige el Destino de todos los Españoles, su signo zodiacal es Capricornio, y lo representa una Cabra que tiene la virtud de llegar siempre a la cima, a la montaña. Me preocupa que lo consiga, porque además según leo, estas personas tienen una gran capacidad para evaluar racionalmente la realidad, los obstáculos no los asustan, y están capacitados para adaptarse a grandes sacrificios y renuncias, con tal de alcanzar su propia ambición. Por contrapartida, suelen tener una vida afectiva dominada por la racionalidad, que es fruto a veces de una timidez controlada, y una frialdad exultante. Además, según pone en esta ordenanza, pueden lograr una amplia autonomía y el éxito social, porque cuando triunfan, después de mucho esfuerzo, la fama suele ser duradera y para siempre.

Esto me preocupa y me asusta como Policía de lo Social en esta España franquista, donde se debe prohibir y censurar todo, para que los españoles, unidos en un destino indivisible en lo Universal, (Franco “dixit”) y, aunque ya parezcamos unos pulpos en un garaje si nos comparamos con Europa, esta frontera que afortunadamente representa un mundo invisible y pagano, porque para eso tenemos a Los Pirineos que nos protegen de las elecciones, el sexo pervertido anti familiar, o del divorcio, que va en contra del Santo Matrimonio que defiende la Iglesia Católica, y algo que llaman “libertad de expresión”, porque hablan lo que quieren y nadie los detiene. Entonces, pregunto yo… ¿que “diablos” hará allí la Policía?…

Han pasado ya tres años. El Mayo del 68 nos preocupa un poco, y también estamos investigando a fondo, eso que llaman aquí en Cataluña los “progres” representados por “La Gauche Divine”, y que quieren que Barcelona sea como el París catalán, donde hay todo un movimiento de Artistas e Intelectuales que apoyan esta corriente, por lo que en la policía andamos estresados y con mucho trabajo, pero hemos logrado nuestra primera victoria, porque Serrat ha cometido un error garrafal: acaba de publicar su Long Play “La Paloma” en castellano, y esto le ha supuesto una confrontación con otros autores catalanistas que lo “acusan de españolista”.

¡Divide y vencerás, vamos bien!. Además, barajaba dos canciones para el Festival de Eurovisión, “El Tirititero” y “La, La, La”, que no ha sido compuesto por él, sino por el “Dúo Dinámico”, es decir, Manuel de la Calva y Ramón Arcusa; y para aliviar su polémica de letras de canciones en español, ha anunciado que cantará este tema en directo en el Festival de Eurovisión, en “CATALÁN”. Ahora mismo estoy leyendo el télex del Ministerio del Interior de Madrid, que nos ordena el veto sistemático de este cantante en Radio y Televisión. Parece ser que prefieren que se cante el “La, La, La”, y que lo haga una chica llamada Massiel, que además de una boca sin límites, enseña unas fantásticas piernas.

Fragmento del libro “Los 12 signos del Zodíaco” de Antonio Domínguez López