“Y no es prudente ir camuflado eternamente por ahí
ni por estar junto a ti ni para ir a ningún lado”.
Es uno de mis temas preferidos,
tiene tantas frases acertadas en un solo tema que es casi perfecto. Es la melodía que nos recuerda que la vestimenta de la autenticidad nos lleva más lejos en la vida. Y que en la pareja, pretender cambiar aquello que antes nos cautivó y ahora por capricho nos molesta no tiene retorno. Hoy me recuerda que algunas situaciones encarcelan y acorralan.