Cierre de la 8º Noche de Literatura en la Calle. La cantante roteña Inma Mora cierra la noche teniendo como coro a tres grandes artistas: Joan Manuel Serrat, Joaquin Sabina y Javier Ruibal. A la guitarra Manuel Martin-Arroyo, al contrabajo la artista argentina afincada en Rota Lila Horovitz.
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Sabina habla de Serrat
Serrat recita a Celaya
Llega una nueva Noche de Literatura en la Calle, uno de los eventos culturales más importantes a nivel andaluz y que se desarrolla en nuestro pueblo de la mano de Izquierda Unida con la colaboración del Ayuntamiento de Rota. De nuevo un rinconcito de nuestro pueblo, en este caso la Plaza de la Merced, volverá a reunir a los mejores escritores y poetas a nivel nacional. Rota volverá a ser por una noche la capital de la cultura.
Este año cabe destacar la participación de los grandes artistas Joan
Manuel Serrat y Joaquin Sabina junto a los siempre fieles Almudena
Grandes, Luis García Montero, Benjamín Prado y Ángel García López, se
suman otros nuevos y algunos que ya han participado en anteriores
ediciones como Pepa Parra, Fernando Macías, Joaquín, Eduardo Mendicutti,
Carlos Pardo, Fernando Lobo, María Hermida, Juan José Téllez y los
roteños Inma Mora y Alan Bike.
La cita de este año ha sido un homenaje de música y palabras a Gabriel Celaya, cuando se cumple el centenario de su nacimiento. Gabriel Celaya (Hernani, 1911/ Madrid, 1991) es uno de los escritores vascos en castellano más destacados de nuestra literatura.
En el Madrid de su juventud conoció a García Lorca, a Buñuel y a Dalí. Fue prisionero de las tropas franquistas, viajó a Cuba de la mano de Nicolás Guillén, fundó revistas y se convirtió en uno de los poetas más comprometidos de la posguerra. El pasado 18 de marzo, se cumplió cien años de su nacimiento.
La cita de este año ha sido un homenaje de música y palabras a Gabriel Celaya, cuando se cumple el centenario de su nacimiento. Gabriel Celaya (Hernani, 1911/ Madrid, 1991) es uno de los escritores vascos en castellano más destacados de nuestra literatura.
En el Madrid de su juventud conoció a García Lorca, a Buñuel y a Dalí. Fue prisionero de las tropas franquistas, viajó a Cuba de la mano de Nicolás Guillén, fundó revistas y se convirtió en uno de los poetas más comprometidos de la posguerra. El pasado 18 de marzo, se cumplió cien años de su nacimiento.
